Debido a los cambios realizados con la reforma energética que modifica la participación de la paraestatal Petróleos Mexicanos (Pemex), el sector ferrocarrilero en Baja California ha registrado un aumento sustancial en el volumen del flete ferroviario que se refiere a la transportación de gas licuado o LP, proveniente de Estado Unidos o Canadá.
El contralor de la compañía Baja California Railroad (BJRR) Manuel Hernández García, indicó que el 70% de lo que maneja la empresa como flete ferroviario es gas LP y han registrado un incremento sustancial en el volumen del flete, debido principalmente a que la reforma energética está abriendo mercados que anteriormente en el caso específico del gas no se tenían contemplados.
Es decir, siempre se había tenido la intervención del gobierno para la venta e importación del gas, lo que “de alguna manera frenaba y restringía el potencial que tenían todas las empresas gaseras para poder desarrollar la venta de su producto”, expresó.
Desde que Pemex dejó de ser intermediario, aunque su participación continúa dentro del control del precio por lo menos durante este año, se ha visto un impacto fuerte, aunado al hecho de que en Canadá el gas se encuentra a precios económicos y ha tenido un excedente en su producción, mencionó Hernández García.
Esto beneficia al sector en el estado, pues “la fórmula perfecta para lograr ahorro sustancial en flete ferroviario es distancia y peso: si el flete viene del lado oeste de Canadá y baja por los estados de Washington, Oregon y California y llega hacia nosotros, la distancia es considerable sumado al peso, y aunado al atractivo precio, se ha provocado un auge tremendo en este tipo de producto”, dijo.
Generalmente el gas se transporta en tanques ferroviarios con una capacidad de entre 30 mil y 32 mil galones, dependiendo de la marca y modelo del tanque; este hidrocarburo cumple con los mismos requisitos de importación que cualquier otro producto y su destino es Valle Redondo, donde las dos principales gaseras del estado, Zeta Gas y Star Gas, lo almacenan y distribuyen, detalló.
Lo más interesante, agregó, es la participación que pueden tener las empresas en el proceso, porque al abrir el mercado lo que se promueve es la activación de nichos que nunca habían podido atacarse.
Debido a que es muy atractivo el precio, aunado al costo del flete, las gaseras pueden mandar el gas que están importando por Baja California hasta Hermosillo, a pesar de que se descargue en Valle Redondo y se traslade por camión hasta Sonora, pues “sigue teniendo un precio muy atractivo”.
Hernández García comentó que, parecido a la situación del gas, ocurre algo similar con la gasolina, por lo que dijo que BJRR está en pláticas con algunas empresas petroleras que se encuentran interesadas en que ésta comience a transportar el producto por tanque, importándolo hacia México para poder atender a las gasolineras locales. Resaltó que el ferrocarril es un medio viable de transportar mercancía a bajo costo: “si me pones a distancias muy cortas no soy muy atractivo, pero si el flete viene desde Canadá o Nueva Jersey, siempre y cuando se tengan las interconexiones correctas para aminorar el costo, se pueden lograr ahorros muy importantes”, refirió.
Finalmente, el contralor de la Baja California Rail Road consideró que las reformas están teniendo un impacto positivo para el sector, por lo que invitó a las empresas interesadas a que pongan los ojos sobre la vía férrea como una opción para la importación y la exportación de sus productos.